El exfiscal de Samaná Robert Justo Bobadilla admitió los hechos de la acusación de acoso sexual cometido contra nueve mujeres, empleadas y usarias de esa dependencia, y fue condenado a un año de prisión, con ocho meses suspendidos, de acuerdo a la abogada Luz Díaz Rodríguez, quien representaba a ocho de las víctimas.
Justo Bobadilla había llegado a un acuerdo con el Ministerio Público, por lo que fue sometido a un juicio penal abreviado en el Juzgado de Instrucción de Samaná.
El tribunal dispuso, además, que el imputado deberá someterse a educación de conducta.
Ante la pregunta de la comunicadora Diana Lora de si las víctimas pueden demandar en lo civil para una indemnización, la abogada respondió que sí podrían hacerlo, pero aclaró que en este caso las querellantes no tenían ninguna pretensión económica, y que así se hizo constar en la audiencia.
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